¿Qué es una hemorragia gastrointestinal?
Sangrado gastrointestinal es un sangrado del tracto digestivo. Puede ser causado por enfermedad hepática, úlceras del estómago, ciertos medicamentos, diverticulosis, cáncer, enfermedad inflamatoria intestinal, vasos sanguíneos anormales (angiodisplasia) o venas débiles (varices o hemorroides).
El sangrado del tracto digestivo superior puede provocar vómitos con sangre de color rojo brillante o negro, como posos de café. El sangrado del tracto digestivo inferior puede provocar heces con sangre o de aspecto alquitranado. La pérdida de sangre puede disminuir el recuento sanguíneo (anemia), lo que provoca cansancio y palidez. Los médicos pueden buscar el sangrado usando una pequeña cámara (endoscopio) introducida por la boca (endoscopia o EGD) o por el recto (colonoscopia o sigmoidoscopia).
¿Qué es la embolización y cómo se realiza?
Embolización es un tratamiento mínimamente invasivo para el sangrado gastrointestinal. A menudo se recomienda la embolización cuando otros tratamientos fracasan.
Primero, se le colocará un analgésico. El médico adormece la piel de la ingle o la muñeca y luego introduce un pequeño tubo (catéter) en un vaso sanguíneo y utiliza rayos X y un tinte para guiarlo hasta el vaso sanguíneo que está sangrando. Inyectará algún material para bloquear el vaso sanguíneo sangrante. Los materiales comunes incluyen: una suspensión llamada gelfoam; pequeñas cuentas, bobinas o tapones metálicos o un super pegamento de grado médico. El material a usar dependerá del tipo de sangrado.
La embolización detiene el sangrado en la parte superior del tracto digestivo en 5-9 de cada 10 personas. y en 8-9 de cada 10 personas en la parte inferior del tracto digestivo.
Embolización para hemorragia gastrointestinal
1. Después de adormecer la piel, se coloca un pequeño tubo (catéter) en el vaso sanguíneo en la parte superior del muslo (mostrado) o la muñeca.
2. Guía el tubo hasta el vaso sanguíneo que está sangrando e inyecta un material especial (se muestra gelfoam) para detener el sangrado.
3. Una vez que el vaso sanguíneo deja de sangrar, el médico retira el tubo y coloca una venda.
¿Cuáles son los riesgos?
La embolización por sangrado gastrointestinal es generalmente un tratamiento seguro cuando lo realiza un especialista.
Aproximadamente 6 de cada 100 personas desarrollan daño permanente en los intestinos o incluso requieren cirugía.
Otros riesgos del tratamiento incluyen:
Daño a otros vasos sanguíneos
Daño a órganos o tejidos cercanos si sus vasos sanguíneos también están bloqueados mientras bloquean el vaso sanguíneo sangrante
Daño a los riñones
Reacción alérgica por el tinte de contraste
Aproximadamente 2-20 de cada 100 personas desarrollan:
Sangrado temporal o moretones alrededor de la herida de la piel
Infección
Dolor abdominal
¿Cuales son las alternativas?
Sus opciones de tratamiento dependen de sus preferencias, salud general y condición médica.
Alternativa 1 Ningún procedimiento. En la mayoría de los casos, el área sangrante se cura por sí sola o con medicamentos. Algunas personas seguirán sangrando tanto que pondrán en peligro su vida, sin embargo, las transfusiones de sangre pueden reemplazar la sangre perdida.
Alternativa 2 Endoscopia. Un endoscopio es una pequeña cámara que se introduce a través de la boca y hasta el estómago. Durante la colonoscopia o sigmoidoscopia la cámara se introduce a través del recto y hasta los intestinos. Los médicos pueden utilizar láseres, clips o bandas para intentar detener el sangrado.
Alternativa 3 Cirugía. Es la opción de mayor riesgo, por lo que sólo se utiliza en emergencias o cuando nada más funciona.